¡Todo el mundo habla de emprender! Sobre todo cuando las cosas se ponen complicadas.
✅ Por eso, pareciera por momentos, que el emprendimiento es el único camino para sobrevivir a las crisis económicas o para alcanzar esa tan deseada “libertad financiera” Pero…¿es realmente así?
Hoy le damos un buen repaso a qué significa esto del emprendimiento. Porque aunque es nombrado a diario, realmente tenemos poco conocimiento de lo que el término en sí mismo implica y sobre todo, cómo nos puede ayudar a triunfar.
Veamos en detalle en qué consiste el emprendimiento
- ¿Qué es el emprendimiento?
- ¿Qué se necesita para iniciarse en el mundo del emprendimiento?
- ¿Es lo mismo emprendimiento que “emprendimiento social”?
- Ejemplos de figuras conocidas con éxito en su emprendimiento
¿Qué es el emprendimiento?
El emprendimiento es el proceso de iniciar y llevar a término un proyecto de negocio por cuenta propia. En inglés este término es entrepreneurship y aunque se puede aplicar a casi cualquier cosa como proyectos personales, actividades deportivas o científicas o inclusive desafíos o juegos, generalmente se reserva para actividades de negocio.
✅ Así pues cuando hablamos de entrepreneurship en inglés normalmente nos referimos a emprendimiento de negocio en español.
Ten presente que el emprendimiento tiene como característica clásica que es una actividad que inicias, o diriges, en primera persona.
Esto quiere decir que, si estás participando en un proyecto nuevo que otra persona dirige y para el que te ha contratado, pues realmente no estás emprendiendo. Al menos no en el sentido estricto del término.
Por eso, cuando se habla del “emprendimiento” se habla de proyectos que has iniciado, que diriges o que - aun siendo un esfuerzo mancomunado - son fruto intelectual de la persona que emprende.
Vamos, que tienen que ser algo tuyo. No puedes emprender para otros.
¿Qué se necesita para iniciarse en el mundo del emprendimiento?
Emprender no es fácil. Vamos a soltar la obviedad ya mismo porque es importante entenderlo: nada nuevo es fácil.
Y como emprender es - por definición y lógica - desarrollar algo nuevo a nivel de negocio por cuenta propia, pues hablamos de algo por lo regular bastante complejo.
Esto hace que emprender tampoco sea algo apto para todo el mundo. De hecho, no es para nada recomendable si eres una persona con poca paciencia, que dependa en extremo de la rutina o que no tenga una altísima capacidad creativa para resolver problemas inesperados.
¿Entonces, qué debes tener para emprender? Pues vamos a ver algunas características clave.
✅ Resiliencia
Lo primero que vas a necesitar para emprender con éxito es la resiliencia. Si no eres capaz de levantarte una y mil veces al darte un buen tropezón, quizás lo de emprender no sea lo mejor para ti.
¿Y por qué es tan importante la capacidad de recuperarse en el emprendimiento? Porque la realidad de hacer algo nuevo es que seguramente - vamos, lo más probable del mundo - es que vas a fallar múltiples veces hasta aprender a hacerlo.
Este es el principal escollo psicológico y mental del emprendimiento. Mucha gente piensa que desarrollar su idea de negocio será “pan comido” y al darse los primeros tropezones se desanima y tira la toalla.
Emprender es resistir. Y resistir es caerse, levantarse y seguir intentándolo hasta conseguirlo.
¡Para ayudarte a conseguirlo, te compartimos esta mega guía con algunas de las mejores ideas de tiendas online para empezar a emprender!
✅ Creatividad
No existe fórmula mágica para solventar problemas. Pero si existe la creatividad. Y esta es la clave.
Los emprendedores exitosos comparten siempre esta característica: son gente creativa que busca soluciones donde otros solamente ven problemas. Por eso, la capacidad de poder encontrar el camino y crear nuevas soluciones para los problemas, es vital.
Si no eres de esas personas que ven un sudoku o un puzle y se emocionan, quizás tendrías que repensarte esto de emprender, porque la creatividad aplicada a la solución de problemas es fundamental para emprender con éxito.
✅ Recursos
Ningún proyecto se puede llevar a buen término sin recursos. Y cuando se emprende esto resulta ser extremadamente importante.
Emprender es una aventura. Seguramente tengas una idea más o menos clara de adónde quieres llegar pero como los navegantes de antaño una vez que salgas a mar abierto los vientos del mercado te arrastrarán a su antojo.
Por eso es vital que tu proyecto cuente con suficientes recursos. Porque para un emprendimiento es imposible poder medir con absoluta certeza, cuánto y de qué cosa va a necesitar o qué problemas va encontrarse.
Como regla no oficial, es recomendable que tengas una reserva de al menos el 30% más del dinero, recursos y/o tiempo del que tenías planificado para tu objetivo original.
✅ Umbrales
Los umbrales son algo que se suele dejar de lado pero que es vital. Lanzarte a la aventura de emprender no debe ser un recorrido hacia el infinito.
Deben existir umbrales, puntos de control, que te permitan medir el avance o, en el peor de los casos, levantar la bandera blanca y retirarte de la contienda.
Sin umbrales corres el riesgo de andar deambulando por el desierto sin saber realmente si tu emprendimiento está avanzando lo que debería avanzar en el tiempo que debería hacerlo.
Para ello, es vital tener un plan de negocios claro y una idea de objetivo final bien definida en cuanto a tiempo y metas. ¡No te lances a crear un emprendimiento para hacer algo!
Correr sin destino solamente sirve para agotarse.
Si quieres tener más información sobre el emprendimiento y el perfil del emprendedor exitoso, te compartimos también esta guía sobre emprendedores para que aclares todas tus dudas.
¿Es lo mismo emprendimiento que “emprendimiento social”?
El emprendimiento social no es lo mismo que el emprendimiento a secas. Aunque el concepto es similar - crear un proyecto desde cero por cuenta propia - el emprendimiento social suele ser utilizado con una finalidad diferente y muy específica.
Cuando hablamos de emprendimiento social normalmente nos referimos a utilizar las técnicas de empresas - de las startups en particular - para desarrollar soluciones a determinados problemas sociales.
En general, hablamos de emprendimiento social cuando nos referimos a ONGs o a organizaciones gubernamentales y sus proyectos suelen ser sin fines de lucro.
El emprendimiento tradicional siempre tiene un fin de lucro. Y es además algo que realizan o ponen en práctica particulares, individuos o empresas privadas.
Además, el emprendimiento social apunta más a la técnica que al hecho. Es decir, hablamos de la forma de lanzar un proyecto o una ONG, usando las estrategias y sistemas que usan los emprendedores para hacer viables sus proyectos.
Mientras que cuando hablamos de emprendimiento social hablamos del hecho: hacer real un proyecto personal o grupal.
Ejemplos de figuras conocidas con éxito en su emprendimiento
Existen mil ejemplos de personas y figuras conocidas que han sido exitosos con sus emprendimientos. Algunos han logrado tal nivel de éxito que ahora sus emprendimientos son empresas internacionales que usamos todos los días.
Y otros han conseguido hacer de sus emprendimientos la fuente de estabilidad social y económica que les mantiene a ellos y a sus familias. Así que emprender sí es posible y sí es rentable. ¡Veamos tres ejemplos!
💡 Steve Jobs: el hombre hecho disciplina
¿A que sabías que íbamos a nombrarlo? Steve Jobs es el arquetipo perfecto de emprendedor exitoso. Un hombre que se hizo de cero, con voluntad y disciplina y que terminó siendo el padre y rostro público de una de las empresas más grandes y rentables en la historia de la humanidad: Apple.
Su historia es el vivo ejemplo de porque la disciplina y la capacidad de solventar problemas es vital para el emprendedor. Jobs construyó todo su proyecto sobre una premisa: crear dispositivos que fueran fáciles de usar.
Y este concepto dirigió absolutamente todas las decisiones de la firma, para bien o para mal.
En su periplo, Jobs fue dado en adopción al nacer, expulsado al menos dos veces de su propia empresa, luchó contra el cáncer y contra múltiples problemas personales y mentales y aun así fue capaz de transformar el mundo al masificar y popularizar los smartphones con el ahora ya legendario iPhone.
Su legado es eterno. ¡Y pensar que todo comenzó en un garaje de California!
💡 Ray Kroc: la criatura creativa
Ray Kroc quizás sea un nombre que no le suene a muchos, pero seguro que al menos una vez en tu vida has comido en su restaurante: McDonalds.
Kroc es el ejemplo más claro de por qué es vital la creatividad para un emprendedor.
Y aunque técnicamente no fue el fundador de McDonalds - fueron los hermanos Richard y Maurice McDonald - la realidad es que Kroc es el que convirtió un restaurante familiar en la primera mega franquicia de comida rápida global de la historia.
¿Cómo lo hizo? Pues el cuento es muy largo para contarlo aquí - inclusive hay una película y todo con Michael Keaton como protagonista - pero resumiendo: lo hizo con creatividad resolutiva.
Kroc siempre fue capaz de ver soluciones a los problemas operativos de la empresa que nadie más podía ver.
Fue el primero en darse cuenta de que el valor de la franquicia de McDonalds superaba a la rentabilidad del control directo de los restaurantes y su visión sobre la importancia de retener la propiedad de las tierras sobre las que se construían los locales convirtió a McDonald en una empresa de bienes raíces, dándole múltiples fuentes de ingreso y aumentando su estabilidad y capital.
💡 Claudia Magdaleno: resiliencia y pasión
Para cerrar queremos dejarte con un mega ejemplo que es más cercano a nuestra realidad: Claudia Magdaleno.
Esta emprendedora mexicana ha sido caso de éxito de Facebook y de Shopify en múltiples ocasiones y es un vivo ejemplo de la resiliencia y la creatividad empresarial.
Claudia se lanzó a construir un proyecto con apenas 4000 pesos mexicanos y con ello levantó una empresa que llegó a tener más de 900.000 seguidores en Facebook, convirtiéndose en una de las principales marcas de trajes de baño de México.
Su tenacidad, su disciplina y su creatividad empresarial fueron clave para llevar adelante un proyecto que muchas veces estuvo a punto de naufragar, pero que salió a flote por su pasión inextinguible.
¡Te dejamos aquí su historia para que la disfrutes!
Con toda esta información, seguro que ya tienes más que claro que es un emprendimiento. ¿Entonces te animas a intentarlo?