Arquímedes pudo haber tenido su momento de revelación mientras se sumergía en la bañera, pero las nuevas ideas creativas no suelen aparecer de la nada.
En lugar de esperar a que la idea perfecta surja, puedes trabajar con un grupo utilizando técnicas de brainstorming creativas para encontrar nuevas propuestas y soluciones innovadoras para los problemas. Aquí te mostramos cómo cultivar una práctica de brainstorming para generar ideas para tu empresa.
¿Qué es el brainstorming?
El brainstorming es una forma de pensamiento creativo colaborativo que implica discusiones grupales para generar una variedad de ideas. Puedes utilizar el brainstorming para resolver problemas o para idear nuevos conceptos.
Las técnicas de brainstorming fomentan la espontaneidad en un entorno que minimiza las inhibiciones, permitiendo que los miembros del equipo propongan tantas ideas como sea posible, reservando la crítica para más adelante.
Al final de una sesión de brainstorming, tú o tu grupo pueden reducir las propuestas a las mejores. Se espera que una idea desencadene otra y luego otra, llevando al final a ideas que valga la pena implementar.
6 técnicas de brainstorming creativas
- Mapa mental
- brainstorming inverso
- Análisis FODA
- Escritura creativa
- Ideación rápida
- Lluvia de preguntas (starbursting)
1. Mapa mental
El mapa mental es una forma de pensamiento visual que te permite organizar ideas desglosando un tema central en subtemas y, a su vez, descomponiendo esos subtemas. Esto te permite agrupar nuevas ideas por categoría y pulir ideas amplias en ideas más específicas.
Comienza colocando la idea principal o la pregunta en el centro de una hoja de papel o pizarra en blanco, luego escribe ideas relacionadas en su periferia inmediata, trazando líneas que conecten las palabras periféricas con la palabra central.
Continúa el proceso de brainstorming moviéndote hacia afuera, descomponiendo cada idea en ideas más pequeñas relacionadas.
Por ejemplo, podrías utilizar esta técnica para generar ideas sobre cómo ampliar la oferta de productos de una empresa para el cuidado de la piel.
Escribe «nuevo producto para el cuidado de la piel» en el centro de tu mapa mental, luego rodea esa idea con diferentes categorías de productos («protector solar», «desmaquillante», «suero para los ojos», etc.) y luego rodea cada una de esas categorías con tipos específicos de productos («protector solar con óxido de zinc», «protector solar no graso», «protector solar para diferentes tonos de piel»).
Una vez que hayas completado tu mapa mental, tendrás un diagrama de posibles vías para expandir tu oferta de productos.
2. Brainstorming inverso
El brainstorming inverso es un enfoque de resolución de problemas que consiste en enumerar todas las formas de empeorar un problema en lugar de resolverlo.
Aunque puede parecer incómodo al principio, este método urge a los participantes a imaginar todas las maneras en que una situación podría salir mal, lo que abre la puerta a la creación de medidas de protección contra esos problemas potenciales.
Este ejercicio creativo puede sacar a la luz problemas o bloqueos pasados por alto, ayudándote a desarrollar estrategias precisas para superarlos.
3. Análisis FODA
El análisis FODA es otra de las técnicas de brainstorming que busca identificar las «fortalezas, oportunidades, debilidades y amenazas» asociadas con una idea o desafío.
Al hacer un análisis FODA, pide a tu equipo de brainstorming que enumere todas las posibles fortalezas asociadas con una idea, quizás sea una propuesta para un nuevo producto o una reestructuración de la organización de tu empresa.
Anota todas las ideas, luego haz lo mismo con las oportunidades (luego debilidades, luego amenazas) sin dedicar tiempo a analizar las respuestas. Una vez que hayas recopilado todas las respuestas, puedes revisarlas y ver qué tipo de ideas surgieron.
4. Escritura creativa
Esta técnica de brainstorming es exactamente lo que parece: planteas un tema o un problema, y cada miembro de la sesión de brainstorming anota sus tres mejores ideas relacionadas con dicho tema o problema.
Una vez que han terminado, pasan sus ideas a la siguiente persona en cualquier dirección, y ese participante continúa desarrollando un poco más las tres ideas. Repite el proceso tantas veces como sea necesario para que cada participante mejore cada idea.
El objetivo principal de este método de brainstorming es eliminar cualquier duda que pueda surgir al expresar ideas en voz alta. También se adapta a personas más introvertidas. A diferencia de las otras técnicas de brainstorming, la escritura creativa permite participar en un pensamiento colectivo y ver cómo diferentes mentes se retroalimentan sin requerir que los participantes discutan las ideas en voz alta.
Limita cada ronda a menos de 10 minutos para mantener el proceso en movimiento y minimizar el sobreanálisis.
5. Ideación rápida
La ideación rápida es un método anónimo de brainstorming en el que cada persona anota tantas ideas como pueda pensar en notas adhesivas. Limita el tiempo para el proceso de ideación y pide a todos los participantes que anoten las primeras ideas que se les ocurran sin evaluarlas.
Cuando suene el temporizador, recoge las notas y organízalas en una pizarra, agrupando ideas por temas similares. Esto te permite identificar tendencias y excepciones. Una vez que todas las ideas estén clasificadas, puedes discutirlas con el grupo.
6. Lluvia de preguntas (starbursting)
Escribe la idea en el centro de una pizarra, dibuja una estrella de seis puntas alrededor de ella y escribe una de estas preguntas en cada punta: ¿Quién? ¿Qué? ¿Cuándo? ¿Dónde? ¿Por qué? ¿Cómo? Utiliza el método de lluvia de preguntas para identificar debilidades y oportunidades potenciales en una nueva idea.
El objetivo del equipo es generar preguntas relacionadas con la idea y tu negocio en cada categoría. Por ejemplo, «¿Quién será el público objetivo de este producto?» «¿Cómo vamos a llevar este producto al mercado?» «¿Por qué un cliente querría comprarlo?».
Anota todas las preguntas que surjan entre los participantes y programa un momento para reflexionar sobre ellas más tarde. Este método no se trata de encontrar respuestas en el momento; se trata de identificar preguntas pertinentes que requieren respuestas y sistematizar tu pensamiento sobre la idea.
Mejores prácticas para un brainstorming productivo
Cada técnica de brainstorming efectiva funciona de manera similar: los miembros del grupo se reúnen en el mismo lugar y aportan sus ideas. Aquí hay algunas prácticas recomendadas que fomentan la creatividad y la comodidad en una sesión de brainstorming grupal:
- Iguala las oportunidades. Cuando estés generando ideas, cada persona, desde un pasante hasta el director general, debe ser tratada por igual, independientemente de su cargo o rango. Las ideas creativas pueden surgir de cualquier persona, y crear un espacio seguro para la expresión personal garantiza que todos se sientan cómodos al contribuir.
- Alienta a los introvertidos. Procura que todos, incluso aquellos que pueden no estar naturalmente dispuestos a hablar en un entorno grupal, tengan la oportunidad de compartir sus pensamientos de una manera que les resulte cómoda. Por ejemplo, para hacer la sesión de brainstorming más accesible para los introvertidos, puedes pedir a los participantes que escriban nuevas ideas en notas adhesivas y luego seleccionar a un voluntario para leerlas en voz alta.
- No temas presentar ideas absurdas. La sesión de brainstorming no es el momento para juzgar ideas; cada idea es aceptable y digna de consideración. Este es el camino más viable para alcanzar lo que al final será una gran idea. Una idea nueva desencadena otra y luego otra, llevando finalmente a las pocas ideas que valen la pena implementar. Las ideas iniciales pueden parecer ridículas, pero pueden conducir a buenas ideas que, de otro modo, no habrías considerado.
- Enfócate en la cantidad sobre la calidad. Al desarrollar ideas durante la fase inicial del brainstorming, más es más. Pide a tu equipo que genere tantas ideas como sea posible. De esta manera, tendrás un grupo más amplio de ideas entre las cuales elegir en la siguiente fase del proceso, cuando evalúes las ideas, descartes algunas y elijas desarrollar otras.
- Permite un foro abierto. Una sesión de brainstorming es una oportunidad para hablar sin reservas, de manera educada pero espontánea, y puede implicar que algunos participantes hablen o interrumpan a otros cuando la creatividad fluye. Esto puede ser una buena manera de generar ideas con rapidez. Por supuesto, si una interacción se vuelve argumentativa, entonces es momento de tomar un descanso y reiniciar.
Preguntas frecuentes sobre técnicas de brainstorming efectivas
¿Se puede hacer brainstorming solo o es mejor trabajar en grupo?
Puedes utilizar la mayoría de las técnicas de brainstorming creativas —como los mapas mentales y el análisis FODA— para desarrollar ideas por tu cuenta, pero el brainstorming en grupo puede ayudarte a encontrar perspectivas inesperadas que de otro modo no tendrías. Recuerda: si estás haciendo brainstorming solo, es indispensable mantener una actitud no crítica; anota cada idea que se te ocurra y reserva la crítica para más adelante.
¿Cómo decido qué técnica de brainstorming es la más adecuada para mis necesidades?
La mejor técnica de brainstorming depende de lo que te ayude a ti y a los miembros de tu equipo a abrirse y sentirse inspirados y creativos. Por ejemplo, algunas técnicas de brainstorming son más visuales que otras, lo que puede ser mejor para personas que piensan en términos de diagramas y estructuras.
¿Cómo puedo fomentar la creatividad y la innovación durante una sesión de brainstorming?
Una sesión de brainstorming fomenta la creatividad cuando cultivas un ambiente abierto e inclusivo, acoges todas las ideas creativas y recompensas a los participantes con aprecio por sus aportes. Agregar estímulos como música, arte o un cambio de escenario puede sacar a los participantes de su zona de confort, despertar su curiosidad e inspirarlos a generar nuevas ideas.