Una forma de evaluar tu rendimiento es comparar tu negocio con otras empresas. Las comparaciones con competidores o empresas que realizan tareas de manera efectiva pueden ayudarte a optimizar tu trabajo. La evaluación comparativa es una herramienta estratégica que ahorra costes, aumenta la eficiencia y resalta formas de obtener una ventaja competitiva.
Aquí descubrirás los diferentes tipos de evaluación comparativa y cómo establecer puntos de referencia para tu negocio.
¿Qué es la evaluación comparativa?
La evaluación comparativa es cuando una empresa utiliza datos para comparar sus actividades con las de otras compañías.
Las empresas suelen crear puntos de referencia para medir su rendimiento frente al de competidores u otras empresas que realicen actividades similares. Sin embargo, la evaluación comparativa se puede realizar contra cualquier organización cuyas prácticas quieras emular.
Puedes establecer puntos de referencia para diferentes áreas de tu negocio, incluyendo equipos, productos y servicios, o datos generales como volumen de ventas e ingresos.
La evaluación comparativa produce estándares e identifica oportunidades de cambio. Como resultado, una empresa podría adoptar nuevas prácticas laborales, participar en reestructuraciones o modificar su estrategia de ventas para mejorar su rendimiento.
¿Por qué empezar a hacer una evaluación comparativa?
La razón principal para crear puntos de referencia para tu negocio es identificar áreas donde tu rendimiento se encuentra por debajo de los estándares establecidos por otras organizaciones. Identificar estas áreas ayudará a enfocar tu tiempo y recursos.
Dependiendo de los datos que recojas de las empresas que elijas para hacer tu evaluación comparativa, el proceso puede mostrarte estrategias para cerrar brechas de rendimiento. Si estás haciendo evaluación comparativa contra competidores directos donde la recopilación de datos es limitada, puede que necesites un plan estratégico para determinar cómo responder a los resultados de la evaluación comparativa.
La evaluación comparativa puede ayudarte a ajustar las características de tu producto para permitirte ser competitivo, introducir un nuevo servicio para captar cuota de mercado o cambiar a un sistema de gestión de las relaciones con clientes (CRM) que le funcione bien a otras empresas.
Por otro lado, la evaluación comparativa se puede utilizar para buscar áreas donde tu negocio supere a la competencia. Así, los puntos de referencia pueden ayudar a confirmar tu propuesta de valor única.
Por ejemplo, la evaluación comparativa ayuda a Shopify a ofrecer el proceso de pago en línea con la mejor tasa de conversión del mundo, confirmando que supera a sus competidores en hasta un 36 %.
5 tipos de evaluación comparativa
1. Evaluación comparativa técnica
Los equipos de diseño utilizan la evaluación comparativa técnica para evaluar las capacidades del producto y realizar mejoras. Supongamos que eres fabricante de teléfonos inteligentes. Tus ingenieros podrían comparar las especificaciones de la batería de tus dispositivos con las de la competencia para crear un teléfono con una duración de batería líder del sector.
2. Evaluación comparativa de rendimiento
La evaluación comparativa de rendimiento indica el estado de salud de tu negocio. Estudia los indicadores clave de rendimiento (KPI), como las inscripciones por correo electrónico o las tasas de conversión en ecommerce, para comparar las actividades actuales con el rendimiento histórico del negocio y los estándares del sector.
También puedes utilizar la evaluación comparativa de rendimiento para auditar tus informes internos. Al comparar cómo se utilizan los KPI en tus equipos, podrías descubrir qué medidas se adaptan mejor a los objetivos generales del negocio.
3. Evaluación comparativa competitiva
La evaluación comparativa competitiva compara tu negocio con competidores directos. Por ejemplo, si tienes una cafetería, podrías comparar tus ventas, precios del menú o calificaciones de satisfacción del cliente con los de otra cafetería popular de tu zona. El objetivo es entender si y por qué un negocio te está superando en una zona específica, o si tú estás superando a tus competidores.
Lo más difícil de la evaluación comparativa competitiva es conseguir los datos de tus competidores directos. En estos casos, puede ser complicado entender con precisión qué están haciendo los competidores para conseguir el rendimiento que tienen.
4. Evaluación comparativa estratégica
La evaluación comparativa estratégica es otro tipo de evaluación externa, esta vez involucrando negocios que no son competidores. Una empresa quiere emular el rendimiento y las prácticas observadas en otras empresas.
Por ejemplo, podrías medir las campañas de marketing de alto rendimiento de una marca de ropa para sacar ideas para tu empresa SaaS. O adoptar tecnología útil que se utiliza en otros sectores, como cuando los minoristas comenzaron a usar códigos de producto universal después de observar el éxito que tuvieron en el sector de los supermercados.
5. Evaluación comparativa interna
La evaluación comparativa interna es una forma de autoevaluación dentro de tu negocio. Implica comparar un equipo, proceso específico o dato de un área de tu empresa con un equipo, proceso o métrica equivalente de otra área.
Imagina que tienes una cadena de hoteles. La recepción de tu hotel de Miami recibe constantemente buenas calificaciones de servicio al cliente. Pero los huéspedes de tu hotel de Nueva York no valoran al equipo de recepción tan favorablemente. La evaluación comparativa interna de datos como los tiempos de respuesta a consultas de clientes o los métodos de resolución de quejas puede revelar la causa de esta diferencia.
Cómo hacer una evaluación comparativa
1. Determina qué vas a medir
La evaluación comparativa funciona mejor cuando se centra en un elemento específico de un proceso o producto. Por ejemplo, para un propietario de restaurante, la velocidad media del servicio sería un punto de referencia menos efectivo. Pero la velocidad del servicio a pleno rendimiento durante los fines de semana sí podría ser un punto efectivo.
Define el alcance de tu punto de referencia, incluyendo el tipo de medición que mejor defina al producto, servicio o proceso. Como propietario de un negocio, probablemente sospeches sobre áreas de tu empresa que están fallando o superando las expectativas; piensa en la evaluación comparativa como una forma de confirmar esas sospechas con pruebas cuantificables.
2. Recopila datos internos
A continuación, es el momento de recopilar datos de tu empresa. Esto implica desglosar los procesos internos para calcular datos de rendimiento.
Para el propietario de un restaurante, esto podría significar controlar el tiempo entre la aceptación de un pedido y la entrega de las comidas a la mesa durante varios fines de semana. Deberás seleccionar las herramientas y tecnologías necesitarás para este proceso, que podrían variar desde simples encuestas a clientes hasta plataformas de análisis de ecommerce.
3. Recopila datos de referencia
En tercer lugar, necesitarás observar los mismos datos de negocios equivalentes para generar tu punto de referencia. Dependiendo del tipo de evaluación comparativa, la recopilación de datos puede tener diferentes formas:
- Para la evaluación comparativa de rendimiento, deberías basarte en informes del sector o en cifras publicadas anualmente, como el retorno sobre activos (ROA).
- Si estás creando un punto de referencia estratégico frente a un negocio no competidor, podrías ponerte en contacto directamente para obtener la información que necesitas.
- En el caso de la evaluación comparativa competitiva, la recopilación de información valiosa puede ser más difícil y requerir investigación de mercado. Por ejemplo, el propietario del restaurante podría visitar otros locales como cliente durante las horas pico para observar sus velocidades de servicio.
4. Controla los resultados e identifica las brechas
Después de haber establecido objetivos y recopilado datos, ejecuta tu prueba de evaluación comparativa y analiza los resultados. Esto implica comparar los datos internos con los puntos de referencia, manualmente o utilizando software de análisis de datos, para identificar brechas de rendimiento.
5. Realiza y controla los cambios
La evaluación comparativa te indicará áreas que deben mejorarse, pero la mayoría de las veces no te dirá cómo abordar esas brechas de rendimiento. Por lo tanto, el último paso del proceso es desarrollar e implementar una estrategia en respuesta a tus resultados.
Si el propietario del restaurante descubre que el servicio lento supone un problema, podría necesitar trabajar con el personal de cocina para revisar los procesos o proporcionarles formación adicional. Comparte los resultados de la evaluación comparativa con tu equipo para adaptar la forma en que trabajas. No olvides controlar los resultados de cualquier cambio que realices.
Cómo hacer una evaluación comparativa en Shopify
Los usuarios de Shopify pueden comparar el rendimiento de su tienda con tiendas similares en tan solo unos pocos clics.
Si has vendido al menos un producto en los últimos 30 días y hay suficientes tiendas similares para proporcionar una comparación significativa, Shopify creará puntos de referencia basados en factores como el volumen de pedidos y las categorías de los productos vendidos.
Para ver un punto de referencia, abre un informe compatible, selecciona el menú Comparar y luego haz clic en Puntos de referencia. La evaluación comparativa está disponible dentro de varios informes de Shopify, incluyendo la tasa de conversión de la tienda en línea, el valor promedio de pedido y los informes de cumplimiento:
Aprende de los mejores
La evaluación comparativa es una forma muy buena de evaluar los puntos fuertes y debilidades de tu negocio y entender qué hace que tu competencia sea tan dura.
Al comparar tu negocio con el de otros, puedes establecer objetivos realistas y encontrar métodos nuevos y eficientes para alcanzarlos. Recuerda, el objetivo de la evaluación comparativa no es copiar lo que hacen otros, sino entender dónde y cómo mejorar.
Preguntas frecuentes sobre la evaluación comparativa
¿Son los KPI lo mismo que los puntos de referencia?
Los KPI (indicadores clave de rendimiento) y los puntos de referencia no son lo mismo. Los KPI son datos internos para medir un proceso o actividad en comparación con los objetivos establecidos; mientras que los puntos de referencia comparan el rendimiento de dos o más procesos o negocios. La evaluación comparativa puede ser útil en la creación de KPI.
¿Qué miden los puntos de referencia?
- Eficiencia: qué resultado se produce a partir de la utilización de determinados recursos.
- Efectividad: el éxito de un proceso, programa o sistema para conseguir los objetivos deseados.
- Calidad: el nivel de calidad en un producto o servicio determinado.
- Coste: los costes totales asociados con un proceso, programa o sistema determinado.
- Tiempo de respuesta: la cantidad de tiempo que se tarda en responder a una acción dada.
- Disponibilidad: con qué frecuencia un proceso, programa o sistema está disponible para utilizarlo.
- Utilización: con qué frecuencia se utiliza un proceso, programa o sistema.
¿Con qué frecuencia deberías hacer una evaluación comparativa del rendimiento?
La evaluación comparativa debe ser un proceso continuo y no un evento puntual. Se recomienda revisar los puntos de referencia al menos una vez al año, pero la recopilación de datos debe continuar indefinidamente, y dependiendo de tu sector, puede ser bueno hacer evaluaciones comparativas con más frecuencia.