Los minoristas en línea siguen creciendo en popularidad y rentabilidad, representando casi el 21 % de las ventas minoristas a nivel mundial. Sin embargo, eso no significa que las tiendas físicas se queden atrás.
Según la Federación Nacional de Minoristas de Estados Unidos, los minoristas abrieron tiendas físicas a un ritmo más rápido de lo esperado tras la pandemia. Marcas como Target, DSW y Macy's encontraron el éxito abriendo tiendas de menor tamaño, como showrooms y pop-ups, conforme los compradores volvieron a los establecimientos físicos en 2023.
Tanto los negocios minoristas como los de comercio electrónico venden productos o servicios a consumidores individuales. Sin embargo, la forma de vender al por menor es bastante diferente a cómo se llevan a cabo las ventas de comercio electrónico. Las ventajas y limitaciones de cada tipo de comercio también varían.
Comercio minorista vs comercio electrónico ¿en qué se diferencian?
El comercio minorista incluye las compras en la tienda, las transacciones en el punto de venta y las interacciones físicas con los clientes, mientras que el comercio electrónico integra las compras en línea, los pagos digitales y el dropshipping.
Por lo tanto, la principal diferencia entre el comercio minorista vs el comercio electrónico radica en una cosa: el entorno de ventas. Por otro lado, el comercio electrónico suele tener costos operativos más bajos que el comercio minorista, lo que permite precios más competitivos.
¿Cómo funcionan las ventas minoristas?
Las ventas minoristas se realizan en tiendas físicas utilizando un sistema de punto de venta (POS). El comercio al por menor incluye desde grandes cadenas comerciales, como centros comerciales y supermercados, hasta tiendas más pequeñas, lideradas por individuos (por ejemplo, tiendas pop-up y puestos en mercados artesanales).

Las tiendas minoristas utilizan un modelo de negocio que depende de una cadena de suministro; y son el último eslabón de la cadena antes de que los productos o servicios lleguen a los clientes. Los bienes pasan del fabricante al mayorista, después al distribuidor, a la tienda física y, finalmente, al consumidor.
¿Cómo funcionan las ventas de comercio electrónico?
Las ventas en comercio electrónico son las que se hacen digitalmente. Las compras en línea pueden hacerse a través de tiendas de comercio electrónico o redes sociales.
A diferencia del negocio minorista, la cadena de suministro del modelo de negocio de comercio electrónico suele tener menos pasos. Esto se debe a que los minoristas en línea tienen más opciones en cuanto a cómo almacenar y enviar sus productos.
Dos de los métodos más populares son el dropshipping y la venta directa al consumidor. Con el dropshipping, un negocio de comercio electrónico vende productos que son almacenados y enviados a los consumidores por un tercero. Por otro lado, la venta directa ocurre cuando los bienes se venden directamente a los consumidores sin la participación de mayoristas o minoristas implicados.

Consejos para construir un sitio de comercio electrónico de éxito
Para crear un sitio de comercio electrónico y vender, necesitarás algo más que una simple lista de productos en una página web.
El comercio electrónico consiste en ofrecer una experiencia de compra segura, conveniente y reflexiva que no haga que los clientes echen de menos una tienda física. Aquí tienes seis consejos para guiarte:
- Invierte en fotos de producto de alta calidad: Dado que los clientes no pueden interactuar físicamente con tus productos en línea, las imágenes de alta resolución y las descripciones detalladas son imprescindibles. Ayudan a los clientes a entender exactamente lo que están comprando, y que se traducirá en menos devoluciones.
- Haz que tu sitio sea compatible con dispositivos móviles: Cada vez más personas compran desde sus teléfonos. Si usas el creador de tiendas en línea de Shopify, puedes asegurarte de que tu sitio web esté optimizado en cualquier dispositivo, sin importar cómo navegan tus clientes.
- Ofrece múltiples opciones de pago a los clientes: Una experiencia de pago seguro y familiar como Shop Pay ayuda a generar confianza en los clientes y asegura que no pierdas ventas realizadas con diferentes tipos de pago.
- Optimiza tu sitio para motores de búsqueda: el SEO sirve para mejorar tu sitio web de comercio electrónico y aumentar su visibilidad en los motores de búsqueda. Aparecer en Google para consultas relevantes atraerá más tráfico orgánico a tu sitio y aumentará las ventas.
- Fomenta las opiniones de los clientes: Las reseñas son una forma de prueba social para los compradores en línea y pueden influir significativamente en las decisiones de compra. Anima a los clientes satisfechos a dejar reseñas y mejora la credibilidad de tu tienda.
- Haz análisis: Las herramientas de recopilación de datos de Shopify rastrean el rendimiento de tu sitio web y muestran cómo interactúan las personas con tu contenido. Usa esta valiosa información para entender el comportamiento de los clientes y satisfacer sus necesidades.
Comercio minorista vs comercio electrónico para consumidores
Comprar en una tienda minorista supone viajar a una ubicación física dedicada, explorar artículos, completar una compra con la ayuda de un vendedor y luego llevarse los productos a casa.
Por otro lado, comprar en línea ofrece muchos posibles puntos de entrada.
Un consumidor puede ir directamente al sitio de su minorista en línea favorito o encontrar una nueva tienda minorista en línea a través de una campaña de marketing digital o una publicación en redes sociales. Una vez allí, los consumidores buscan los productos que desean, comparan precios, realizan una compra y esperan a que esos productos lleguen a su casa.
La decisión entre cuál es la mejor opción depende del tipo de experiencia de compra que el cliente prefiera, el nivel de atención al cliente deseado y el tipo de experiencia de compra que más se adecúe al estilo de vida del cliente.
La experiencia de compra
- En qué se parecen: Tanto el comercio minorista como el comercio electrónico dependen de tácticas como el merchandising para mejorar la experiencia de compra y exhibir productos de manera atractiva. La identidad de marca también juega un papel importante en ambos tipos de comercio como una forma de establecer familiaridad y consistencia.
- En qué se diferencian: En línea, los compradores deben confiar en cosas como las descripciones de productos, las imágenes y las reseñas para tomar decisiones. También pueden investigar un poco más y comparar precios de diferentes artículos en diferentes minoristas en línea.
Sin embargo, en una tienda minorista física, los compradores pueden tocar e interactuar físicamente con los productos o servicios. Por ejemplo, un cliente puede probar un colchón para asegurarse de que sea cómodo o probarse unos zapatos para comprobar que sean de su talla.
Los datos sugieren que este enfoque táctil puede hacer que los consumidores se sientan más seguros en sus compras: se estima que el 20 % de los artículos comprados en minoristas en línea se devuelven. En las tiendas físicas, esta cifra es tan solo del 9 %.
Atención al cliente
- En qué se parecen: Tanto las ventas minoristas como las ventas de comercio electrónico se valen de la atención al cliente para resolver problemas, responder preguntas y brindar ayuda con devoluciones y cualquier problema posterior a la compra.
- En qué se diferencian: Las tiendas físicas ofrecen una atención al cliente proactiva a través de los empleados que dan la bienvenida a los clientes, ofrecen ayuda mientras exploran los productos y asisten en el proceso de pago una vez que han terminado.
La atención al cliente en comercio electrónico es más reactiva: los clientes no tienen por qué necesitar
interactuar con atención al cliente para completar sus compras. Sin embargo, un buen equipo de atención al cliente será fácil de contactar a través de múltiples canales como el correo electrónico, el chat en vivo y las redes sociales.
Conveniencia
- En qué se parecen: Todos los minoristas en línea y muchas tiendas físicas ofrecen envío a domicilio. De hecho, depende del tipo de tienda minorista: los artículos más grandes (como muebles) suelen ser enviados, y algunas tiendas físicas minoristas también pueden ofrecer el envío a domicilio para artículos que están fuera de stock.
- En qué se diferencian: Comprar en línea se basa en la conveniencia: gracias al ordenador o el teléfono, es posible comprar en cualquier momento y desde cualquier lugar, de manera sencilla. Y llegar a una tienda física puede llevar más tiempo. Los minutos u horas gastados viajando y buscando aparcamiento pueden ser una inversión de tiempo que no todo el mundo se puede permitir.
También supone una inversión monetaria, ya sea por el precio del transporte en metro para llegar a una tienda o pagando por la gasolina para llegar allí. Sin embargo, las tiendas físicas ofrecen una sensación de gratificación instantánea, ya que generalmente no hay espera para que tus artículos sean enviados.

Comercio minorista vs comercio electrónico para negocios
Para los propietarios de negocios, responder a la pregunta “comercio minorista vs comercio electrónico” depende de lo que estén vendiendo y a quién. Hay una gran diferencia entre un individuo que vende algunos productos por su cuenta y un negocio más grande y establecido que vende cientos de productos a una base de clientes consolidada.
Decidir entre un negocio minorista y un negocio de comercio electrónico se reduce a entender los factores específicos de tu negocio: el costo inicial de inversión, el alcance de las operaciones comerciales y la capacidad de vender productos a través de múltiples canales.
Nivel de inversión y costo
- En qué se parecen: El nivel de inversión para negocios minoristas y de comercio electrónico depende de varios factores, como los costos iniciales de la puesta en marcha y el alcance de los productos o servicios, es decir, si estás vendiendo unos pocos artículos o cientos.
- En qué se diferencian: Poner en marcha una tienda en línea suele ser menos costoso que invertir en una tienda física. La tienda en línea requiere invertir en una plataforma de comercio electrónico, un alojamiento web y en herramientas de marketing digital, entre otras cosas. Un negocio minorista físico, sin embargo, es mucho más costoso y lleva más trabajo. Entre las consideraciones para estos nuevos propietarios de negocios están los costos de alquiler o arrendamiento, el seguro anual, los costos de marketing y más.
Operaciones
- En qué se parecen: Tanto las tiendas físicas como las en línea dependen de operaciones comerciales para supervisar el inventario y rastrear los costos.
- En qué se diferencian: Las tiendas físicas pueden requerir mucho trabajo manual. Y ese trabajo se suma: los costos incluyen contratar empleados, mantener el inventario y el espacio, y lidiar con cambios en la oferta y la demanda.
Por otro lado, las operaciones minoristas de comercio electrónico pueden automatizarse en gran medida con una variedad de herramientas especialmente concebidas para el comercio electrónico. Estas herramientas ayudan a agilizar distintas tareas, como la gestión diaria del inventario o las campañas de marketing digital de larga duración.
Riesgos y limitaciones
- En qué se parecen: Todos los minoristas en línea y muchas tiendas físicas se exponen al riesgo de responsabilidad asociado con el uso de sus productos. El robo y el fraude de devoluciones también son riesgos para ambos.
- En qué se diferencian: Si bien los robos pueden ocurrir tanto en negocios físicos como en línea, este puede tomar diferentes formas. Las tiendas minoristas tienen que vigilar los hurtos, mientras que los negocios de comercio electrónico deberían prestar más atención a las amenazas internas. Las empresas en línea tienden a estar más en riesgo por violaciones de datos, aunque los minoristas físicos tampoco son inmunes a esta amenaza.
Los modelos de comercio minorista y de comercio electrónico tienen su propio conjunto de riesgos y limitaciones. Sin embargo, ambos deben procurar evitar los robos, las violaciones de datos y el fraude.
Qué tener en cuenta al elegir entre el comercio minorista y el comercio electrónico para tu negocio
En última instancia, cuando los propietarios de negocios se plantean el comercio minorista o el comercio electrónico, deben tener en cuenta tres cuestiones principales:
Modelo de negocio
Ciertos modelos de negocio son más adecuados para el comercio minorista, mientras que otros son más adecuados para el comercio electrónico. Por lo tanto, es importante hacerse preguntas que ayuden a determinar esto desde el principio: ¿Utilizarás un mayorista y un distribuidor? ¿Venderás directamente a los consumidores? ¿Venderás productos que hayas fabricado tú mismo?
Costos iniciales
Iniciar cualquier negocio puede ser costoso. Después de calcular el presupuesto, compara los costos operativos y otro tipo de gastos derivados de alquilar y operar una tienda física frente a los de utilizar una plataforma de comercio electrónico como Shopify. Recuerda: siempre puedes escalar en el futuro.
Tamaño y alcance
Considera el tamaño del negocio y la cantidad de bienes y servicios que ofreces. Dependiendo de esa respuesta, puedes optar por el comercio minorista, el comercio electrónico o una combinación de ambos. Piénsalo de esta manera: podrías iniciar una pequeña tienda de comercio electrónico para tus velas hechas a mano y también ofrecerlas en una tienda pop-up de tu barrio.
Los beneficios de un enfoque omnicanal
En 2025, se trata menos de separar el comercio minorista del comercio electrónico y más de integrar los diferentes canales en una única experiencia de cliente omnicanal. El enfoque omnicanal es, esencialmente, una forma elegante de decir que los consumidores pueden encontrar tus productos tanto en la tienda física como en la tienda en línea.
Los compradores de hoy en día no utilizan un solo canal, sino que la mayoría utiliza una combinación de todos los canales para completar su compra.
Casi el 50 % de las marcas afirman que unificar las operaciones y los datos de las tiendas en línea y las físicas será su mayor desafío en el próximo año. Pero las empresas que consiguen adaptarse a una estrategia de comercio unificado tienen el éxito asegurado.

Tanto las ventas procedentes del comercio minorista como las del comercio electrónico mejoran cuando los productos se ofrecen a través de múltiples canales. Esto significa ofrecer a los consumidores múltiples puntos de contacto (ya sea a través de redes sociales, reseñas de clientes o marketing por correo electrónico) para que puedan encontrar y comprar productos con facilidad.
De hecho, casi todas las grandes tiendas físicas ofrecen también venta minorista omnicanal. La mayoría de las tiendas de comercio electrónico ofrecen venta minorista multicanal, lo que significa que venden productos a través de un sitio de comercio electrónico dedicado, redes sociales y aplicaciones móviles.
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Aunque el comercio minorista y el comercio electrónico tienen mucho en común, al final ofrecen experiencias muy diferentes, tanto para los clientes como para los propietarios de negocios. Encontrar la mejor opción para los productos o servicios que ofreces dependerá significativamente del modelo de negocio que hayas elegido, los costos de inicio presupuestados y el tamaño y alcance de tu negocio.
Preguntas frecuentes sobre comercio minorista vs comercio electrónico
¿Se puede considerar el comercio electrónico como una forma de comercio minorista?
Sí, el comercio electrónico se considera una forma de comercio minorista. El comercio minorista se define como la venta de bienes o servicios al consumidor final, y el comercio electrónico es una forma de comercio minorista que implica la compra y venta de bienes y servicios en línea.
¿Es el comercio electrónico mejor que el comercio minorista?
Sí, el comercio electrónico es mejor que el comercio minorista. Tiene costos operativos más bajos y un alcance más amplio, requiere menos tiempo y esfuerzo, facilita las transacciones más rápidas y aprovecha la automatización para operar un negocio más eficiente.
¿Cuáles son 3 tipos de comercio electrónico?
- Business-to-Consumer (B2C): Esta es la forma más común de comercio electrónico, donde las empresas venden productos o servicios directamente a los consumidores en línea.
- Business-to-Business (B2B): En este tipo, las empresas venden productos o servicios a otras empresas en línea. Esto a menudo implica transacciones al por mayor.
- Consumer-to-Consumer (C2C): Este tipo de comercio electrónico implica transacciones en línea entre consumidores, generalmente facilitadas por una plataforma de terceros como eBay o Etsy.
¿Cuál es un ejemplo de comercio electrónico?
Un ejemplo de comercio electrónico es un negocio que utiliza la plataforma Shopify para crear una tienda en línea. Shopify proporciona a las empresas las herramientas para vender sus productos directamente a los consumidores a través de internet, y que permite maneras desde las listas de productos hasta el procesamiento de pagos y la gestión de envíos.